El cierre de listas para las elecciones legislativas en la Ciudad dejó fuertes tensiones dentro de La Libertad Avanza, donde el vocero presidencial Manuel Adorni terminó perdiendo el control de la nómina que encabezará. La puja fue ganada por el matrimonio conformado por Darío Wasserman y Pilar Ramírez, que desplazaron a los Menem del armado porteño y dejaron a varios legisladores actuales sin posibilidad de renovar sus bancas.

Según pudo saber Noticias Argentinas, Wasserman, vicepresidente del Banco Nación y armador de Karina Milei en la Ciudad, logró imponer tres de los cuatro primeros lugares en la boleta. Su esposa, la diputada Pilar Ramírez, también presidenta del partido libertario en CABA, fue clave en el armado.

La gran perdedora fue la familia Menem. Ni Martín ni Lule lograron ubicar a su alfil, Sharif Menem, presidente de la Juventud de LLA, en la lista. A pesar de sus vínculos con la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, el clan riojano fue desplazado por el círculo más cercano al matrimonio Wasserman-Ramírez.

En el segundo lugar de la lista, Wasserman busca ubicar a Solana Pelayo, directora del Banco Nación, relegando la aspiración de los Menem. En el tercer puesto quiere colocar a Nicolás Pakgojz, titular del AABE y exfuncionario de Horacio Rodríguez Larreta, mientras que el cuarto lugar sería para Andrea Freguia, ex asesora del senador Nacho Torres, actualmente parte del equipo de Ramírez en CABA.

El quinto puesto podría ser para el bullrichista Juan Pablo Arenaza, aunque también es mencionado para el tercero.

La jugada dejó heridos: Rebeca Fleitas, Lucía «La Karateca» Montenegro, Leonardo «El Funebrero» Seifert y Marina Kienast no tienen garantizada su continuidad. Muchos de ellos se habían sumado al bloque de Ramírez con la promesa de renovar. Hoy, corren de atrás.

El cierre dejó en evidencia una feroz interna entre karinistas y el espacio vinculado a Santiago Caputo, cuyo armado fue vetado por Karina Milei, incluyendo al influencer conocido como «Gordo Dan». «Espantan a los porteños», habrían argumentado desde su entorno.

La pulseada definió el poder real dentro de LLA porteña: Wasserman manda, Adorni encabeza pero no decide, y los Menem quedaron afuera.